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<::. I N D E L E B L E .::>

martes, febrero 26, 2008

y entonces, decia, estaba sentada en la esquina, lugar: sombrillafuera-con-cigarrillo-en-mano esperando mi almuerzo. Pasa él, un n.n de Av. del Libertador, mira mi mesa, lo miro con cara de signo de pregunta, pregunta si se puede sentar, "no", respondo, reitera la pregunta, "no", vuelvo a repetir, pide permiso para una última pregunta:


-Te acordás de mí? soy el que el otro dia te dijo que quería cumplir la ley del embudo con vos
(como me iba a olvidar si me reí una semana entera por eso y hasta pensé que era el limado del subte que se creía Juan Pablo cuando me vió con el libro en túnel en la mano)
y bueno.. veo que seguís por aca almorzando
(se sienta)
"no te sientes" - repito fijando mi mirada que ya no era amigable.
- ok, no me siento, te hablo parado, no se tu nombre, no se quien sos, sé que almorzás aca a partir de la una, que la mayoría de las veces pedis carnes blancas con alguna salsa rara, que sos conocida de las mozas porque les hablás siempre, que te gusta la música porque en tu tatuaje se descubre una clave de sol las veces que lo dejás ver, que tu gerente te llama en tu horario de almuerzo y vos te mordés los labios antes de atender, te mordés los labios... Eso, te dejo almorzar tranquila.


en mi vida me dieron tantos detalles.
lástima que él no sabe que la rubia de rulos ya no va a almorzar mas ahí porque se vá, lejos. Mierda, le hubiera dicho.
Haditas